— 10 de mayo de 2018
Sentimiento de marca, la clave para diferenciar tu negocio.
Existen más de 300 millones de marcas en el mundo, pero sólo hay un puñado de esas marcas que logran sobresalir y engancharnos.
Muchas de esas marcas ofrecen prácticamente los mismos productos que otras empresas (commodities) sin embargo hay algo que las hace destacar y es la forma en que hacen sentir a sus clientes.
La mayoría de esas empresas transmiten una serie de atributos intangibles que se asocian más con emociones que con las características o cualidades del producto. Por ejemplo cuando se habla de Disney las personas tienden a asociar la marca con sentimientos como alegría, felicidad, ilusión, nostalgia; no se asocia directamente con peluches, muñecos, ropa, accesorios, aunque sus tiendas siempre están abarrotadas de personas comprando los productos.
De igual manera pasa con la marca Harley Davidson, cuando hablamos de ella lo primero que viene a nuestra mente son esos sentimientos de libertad, rebeldía, pasión, poder y aventura.
Ian Mackenzie dice que "usted recuerda un tercio de lo que lee y la mitad de lo que la gente le cuenta, pero recuerda el cien por ciento de lo que siente". Es decir las personas podemos olvidar lo que leemos, vemos o escuchamos pero nunca vamos a olvidar cómo nos hicieron sentir.
El experto en branding Andy Stalman, dice que todas las empresas hacen branding pero hay algunas que lo hacen de forma consciente y otros de forma inconsciente. Para los segundos las posibilidades de cometer errores como dañar su imagen, reputación o perder clientes, son mayores.
Branding es el proceso de desarrollo y construcción de marca. Involucra todas las experiencias que el cliente tiene con la marca, cómo se ve su imagen, en qué tono habla, cuál es su propósito, propuesta de valor y por supuesto cómo hace sentir a su cliente.
Muchas empresas no prestan atención a ese sentimiento que generan, sin embargo este puede llegar a ser un diferenciador clave para el negocio. Ya no basta sólo con comunicar los beneficios o características de un producto, las personas quieren sentirse especiales y quieren formar parte de algo más importante.
Simon Sineck en su libro Start with Why, dice que las empresas que logran conectar emocionalmente con sus clientes experimentan un crecimiento y una lealtad de parte de ellos que perdura con el tiempo.
Dentro de mi proceso de estrategia de marca, trabajo con el cliente para definir los sentimientos de la marca a partir del propósito de su empresa, estos se deben ver reflejados en todo el material visual y en las estrategias de negocio y marketing que se realicen.
4 Pasos para diferenciar tu negocio fácilmente.
Paso 1.
Lo ideal sería que tengas definido cuál es el propósito de tu empresa, ¿por qué existes?. Este propósito debe ser inspiracional. Debe hacer sentir a las personas que forman parte de algo importante.
Por ejemplo:
- El propósito de Walt Disney es: hacer feliz a la gente.
- Para Harley Davidson su propósito es: Cumplir sueños de libertad personal.
Para comprender mejor el concepto de propósito de un negocio te recomiendo ver este video de Simon Sinek.
Paso 2.
De acuerdo a cómo quieres inspirar a las personas así las debes hacer sentir, para ello lo que debes hacer es definir ese o esos sentimientos que quieres dejar en cada uno de tus clientes. Puedes hacer una lista de mínimo 10 sentimientos y luego elegir los tres principales y de esos luego sacar uno que sería el más importante.
En la siguiente lista puedes encontrar algunos que puedes aplicar a tu marca.
- Simpatía
- Orgullo
- Felicidad
- Alegría
- Motivación
- Seguridad
- Confianza
- Poder
- Empoderamiento
- Valentía
- Cuidado
- Éxito
- Oportunidad
- Entusiasmo
- Esperanza
- Fuerza
- Humildad
- Tranquilidad
- Alivio
- Inspiración
- Inteligencia
- Libertad
Paso 3.
Luego debes revisar cada paso o proceso y punto de contacto de tu negocio; y verificar que en cada uno de ellos se consiga transmitir el sentimiento definido.
Paso 4.
Procura que en cada interacción con el cliente, éste pueda experimentar ese sentimiento que hace especial y diferente a tu marca.
Facilítale a las personas el elegirte.
Una vez que el cliente tiene una experiencia con tu marca y eso le genera un sentimiento positivo, le será mucho más fácil volver a realizar una compra o utilizar un servicio, pues ya sabe qué esperar de tu marca.
Así que, analiza bien qué sentimiento estas dejando en la mente de tu cliente y si no es el que quieres, sólo pone en práctica el ejercicio anterior, cuanto más pronto lo corrijas mejor será para tus clientes y negocio.
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