— 29 ENERO de 2024
¿Por qué tu segmentación de mercado no te da los resultados esperados?
Parece un término sacado de la serie Mad Men, pero la segmentación sigue siendo una práctica fundamental en el desarrollo de marcas y negocios.
Más allá de sólo dividir al mercado, se trata de un paso clave para tomar decisiones más estratégicas, que te ayuden a ganar.
La segmentación se puede definir como el proceso de agrupar a los clientes potenciales con necesidades o características similares.
Pero, ¿por qué es tan importante?
En esencia, la segmentación permite a las marcas comprender profundamente a su audiencia para ofrecer productos y servicios diferenciados, con propuestas de valor y mensajes que resuenen con ellos.
No todas las segmentaciones son iguales.
Mientras que las tradicionales se centran en datos demográficos básicos, las estratégicas van más allá, aportando información valiosa y más concisa para tomar mejores decisiones.
Puedes segmentar por necesidades, ubicación geográfica, estilo de vida, comportamientos, intereses, entre otros.
Lo importante con la segmentación es que la forma en la que lo vayas a realizar, debe aportar información valiosa para tomar decisiones de negocio.
Las segmentaciones tradicionales donde sólo tienes datos, como edad, sexo, estado civil o profesión te dan información muy genérica y básica.
La clave reside en identificar segmentos que no solo sean accesibles y rentables, sino que también tengan capacidad de pago y lo más importante, que tengan alguna necesidad, problema o deseo que tú resuelves.
Aquí te dejo este vídeo donde te comparto cómo hacer una segmentación de mercado.
5 errores comunes en las segmentaciones y que pueden estar frenando tus resultados:
1. Segmentación demográfica excesiva:
Enfocarse exclusivamente en variables demográficas como edad, sexo, ingresos y profesión.
Esta aproximación puede resultar en una visión demasiado limitada de la audiencia, ignorando aspectos psicográficos y comportamentales clave.
2. Segmentación sin validez estratégica:
Crear segmentos que carecen de relevancia estratégica para el negocio.
Si los segmentos no están alineados con los objetivos y capacidades de la marca, la segmentación carece de utilidad y puede llevar a esfuerzos desperdiciados.
3. Segmentación estática:
Olvidar que los mercados y las necesidades de los consumidores evolucionan con el tiempo.
Una segmentación estática puede volverse obsoleta, dejando a la marca desconectada de las cambiantes demandas y preferencias del mercado.
En este artículo te comparto 35 Preguntas para descubrir las necesidades de los clientes.
4. Segmentar sólo por percepciones Internas:
Utilizar criterios internos de la empresa para segmentar en lugar de comprender las percepciones del cliente.
Este enfoque puede llevar a decisiones basadas en suposiciones internas que no reflejan las verdaderas necesidades y expectativas de los clientes.
5. Segmentación desalineada:
Segmentar de manera efectiva pero no alinear al resto de departamentos, puede llevar al fracaso.
Todos en la empresa deben tener claros los segmentos a los que se dirigen, la oferta y los mensajes de cada uno, de lo contrario puede llevar a cometer errores fatales, como por ejemplo: pérdida de clientes, lanzamientos equivocados, mal posicionamiento, etc.
En conclusión.
La segmentación en branding no es simplemente una estrategia, es una filosofía que impulsa el éxito empresarial. Las marcas que entienden a su audiencia a un nivel profundo no solo atraen, sino que se convierten en líderes de la industria. La segmentación bien ejecutada es la brújula que guía a las marcas hacia un futuro de relevancia y conexión auténtica con sus clientes.
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